Identidad no binaria ¿Hora de un mundo sin género?

Aunque tal vez no todos estemos preparados para superar el binarismo hombre/mujer, sí es hora de abrir la mente, aceptar las diferencias de género y reconocer que los derechos deben aplicarse por igual para todos.

Cuando nos preguntan quiénes somos, la mayoría respondemos definiéndonos con alguno de los géneros tradicionales: soy un hombre o soy una mujer. Pero esta forma binaria de clasificación de las personas, en la que se asumen los rasgos de género1 unidos al sexo2 con el que se nace, no es la realidad para una parte de la población.
En todo el mundo, muchas personas no se sienten identificadas con su sexo o con lo que socialmente se considera el “ser mujer” o “ser hombre”, ni tampoco que estén en un “punto intermedio”, sino en algún lugar distinto entre estos polos, donde muchas veces transitan o se mueven. Tampoco tienen por qué definirse como homosexuales o heterosexuales, o ser andróginos, lo que implica es toda una escala de grises que refleja la diversidad propia de la humanidad.
El brillante músico británico David Bowie fue uno de los primeros famosos en reconocer su identidad no binaria. Entre otros que han adoptado públicamente lo que algunos llaman “queer”, “género fluido”, “neutral” o “ágenero” están también el vocalista de la banda Aerosmith, Steven Tyler; la estrella de películas como X-Men, Elliot Page; la popular cantante Demi Lovato; la actriz de Hollywood Tilda Swinton; la modelo y actriz de la serie Orange es New Black, Ruby Rose; el cantante Sam Smith; y la cantante Miley Cyrus. Todos ellos coinciden en algo: no es que no les guste ser hombre o mujer, sino que los encasillen, pues se sienten en armonía con ambos géneros.
En Colombia, es conocido el caso de la brillante y respetada científica Brigitte Baptiste, bióloga, máster en conservación y Ph.D Honoris Causa en Gerencia Medioambiental, actual rectora de la Universidad EAN, directora por más de ocho años del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt, y quien fue una de las conferencistas del Seminario Internacional Exposer Digital Coomeva 2021.
Derechos para todos
Más allá del aspecto físico o la forma de nombrar una persona no binaria, la garantía de sus libertades y derechos es un tema de mayor preocupación.
Hoy, países como Australia, Bangladés, Pakistán, Nepal, Alemania, India, Canadá, Malta y Nueva Zelanda tienen en común el reconocimiento del derecho a la identidad no binaria. Sin embargo aún falta mucho por recorrer, sobre todo porque para muchos es difícil imaginar un mundo sin el binarismo de género y más aún, un mundo sin género. Incluso algunos piensan que en ese escenario todos seríamos forzados a usar túnicas color beige y tener el pelo cortado al rape, pues se ve al género como si fuera un disfraz, en vez de un conjunto de relaciones de poder.

Mientras tanto, una forma muy sencilla de mostrar respeto ante una persona de género no binario es llamarla por el nombre que ha elegido y por el cual canaliza su identidad.
¿Difícil de entender? Para quienes hemos aprendido a ver la identidad de género de forma binaria puede serlo. Hoy este es un terreno cambiante y más complejo, que requiere que abramos nuestra mente y aceptemos las diferencias sin discriminación.
No es una moda
Varios historiadores han aclarado que la idea de una identidad sin género no es una invención moderna ni eurocéntrica, como algunos señalan, sino que en distintas culturas de todo el mundo, a lo largo de la historia, se registran casos e incluso sociedades enteras que adoptaron identidades de género no binarias.
1 El género se refiere a las actitudes, sentimientos y comportamientos que una cultura asocia al sexo biológico de una persona, según la Asociación Estadounidense de Psicología. En otras palabras, el género es una construcción social y una identidad social.
2 Sexo describe el sexo biológico que se le asignó a una persona al nacer. Se basa en las características biológicas de la masculinidad o la feminidad según lo indican los cromosomas, las gónadas, las hormonas y los genitales.
Fecha de publicación 23/06/2021
Última modificación 28/06/2021